HABLEMOS DE… THE ROYAL TENENBAUMS: UN PASO ADELANTE EN LA FILMOGRAFÍA DE WES ANDERSON
Se estrenó en los cines argentinos Asteroid City, la nueva película del director estadounidense, mundialmente reconocido por su fetiche con la simetría y los colores pastel. Por ese motivo, en los últimos días decidí repasar y ver algunas de las que me faltaban dentro de su filmografía. Una de esas es la película que nos compete en este post, dirigida en el 2001 por el nacido en Houston, Texas.
Un film que comprende lo satírico y rebelde, que a más de uno atrapa por la originalidad en la forma de desarrollar a los personajes y la cinematografía del director. Es la vida de la familia Tenenbaum, en la que cada miembro representa un universo único y surrealista a la vez, conformado por un elenco integrado por estrellas como Gene Hackman, Anjelica Huston, Ben Stiller, Gwyneth Paltrow, Luke Wilson, Grant Rosenmeyer, Jonah Meyerson y Bill Murray.
Wes nos lleva en un viaje con su estilo característico por la desastrosa relación del personaje de Hackman con sus hijos y esposa, a quienes decidió abandonar hace muchos años, y ahora pretende reconquistar, ya que está en bancarrota y se enteró de que a Etheline le han propuesto matrimonio. Por esa razón, finge tener cáncer de estómago, para lograr entrar de nuevo a su antigua casa, lo cual logra hacer y vive quizá algunos de los mejores días de su vida.
En esta película lo más interesante es que termina de pulir lo que venía construyendo en sus dos anteriores, de forma sólida: en ambas tenemos situaciones de personajes que son adultos, pero actúan como chicos. En Bottle Rocket, el personaje de Owen Wilson actúa de forma inmadura e inocente (mismo no tiene malicia a la hora de llevar a cabo los robos y trata de forma educada a las víctimas de los robos), lo opuesto al personaje de su hermano en la vida real, Luke, quien en un principio hace lo mismo, pero encuentra el amor y es lo que termina alejándolo de la vida criminal, encontrando un trabajo formal y madurando. En The Royal Tenembaums tenemos al personaje de Stiller siendo adulto, pero actuando de forma infantil y haciendo llevar a sus hijos una falsa vida de adultos (se manejan solos, entrenan como adultos, visten como tales).
También vuelve a traer engaños y desencuentros amorosos que involucran a varios personajes. En Rushmore, el personaje de Bill Murray es el tercero en discordia en el amor imposible entre el personaje de Max y la profesora. En The Royal Tenenbaums, Murray es el engañado por el personaje de Palthrow quien tiene un idilio con el personaje de Owen Wilson y, posteriormente, con su hermanastro. Lo mismo pasa con respecto a la falsa adultez que mencioné anteriormente: el personaje de Max Fischer es un joven que se cree adulto, viste como tal, hace mil actividades, piensa que puede conquistar a la profesora del colegio mayor de edad, pero es sumamente irresponsable y no asume ni los años que tiene ni su obligación escolar.
Además, lo logradas que están las situaciones dramáticas acá: es quizá de esta primera parte de la filmografía la más difícil de ver, por lo que implican los conflictos en sí, por lo atados al pasado que están los personajes y el peso que conlleva la búsqueda de supervivencia, todos de alguna manera están marcados por la tragedia y los problemas individuales pasan a ser grupales y es lo que termina volviendo a vincular a esta familia disfuncional. El manejo del humor es indispensable para que uno pueda pasar la dureza de las situaciones representadas por Wes y Owen Wilson, quien además de actuar es también guionista del largometraje.
En términos de dirección, también hay ideas muy logradas: por ejemplo, al principio de la película vemos al personaje de Royal sentado en la mesa hablando con sus hijos, la cámara nos muestra la distancia enorme que hay entre él y estos, sin necesidad de un díalogo. También cuando presentan al personaje de Ben Stiller, no queda la cámara fija, se utiliza cámara en mano para poder mostrar esa inestabilidad y esa falta de templanza a la hora de hacer las cosas.
Wes sigue a los personajes en su conversación, jugando todo el tiempo con la profundidad de lo que se puede ver detrás de ellos, como el investigador privado que contrata Bill Murray, el cual aparece en lo más alto en la escena que marca el fin de la relación entre el personaje de Palthrow y Wilson. No solo eso: es una escena similar a la de Rushmore, en la que el personaje interpretado por Jason Schwartzman le cuenta a la mujer de Bill Murray que lo engaña, lo que genera el mismo efecto que lo que sucede en The Royal Tenenbaums: el quiebre de una relación amorosa.
Una película brillante, que tiene de todo: ideas de dirección, de guión, romance, drama, comedia, problemas existenciales, con un Wes que toma lo que había hecho hasta entonces y lo eleva. Seguiré metiéndome en lo que me falta de su obra y repasando lo que ya tengo visto. Abajo si quieren me pueden contar si les falta ver alguna o están al día con sus películas